Me permito recordaros que es imprescindible llevar un buen calzado de Gore-tex, impermeables que nos protejan bien, tiritas, agua, un neceser con lo necesario para el aseo diario, algún analgésico, etc. El camino primitivo es duro y si llueve, se convierten los caminos en auténticos barrizales por los que corre el agua sin control.
Volvemos a empezar otra etapa en pendiente, subir y bajar por caminos en busca de las aldeas que adornan cada etapa, será casi la tónica de este camino. Comenzamos pasando por debajo del arco que une el palacio de Valdés y la torre medieval, ya en el camino la subida que en un principio era suave y fácil, se torna cada vez más pronunciada, el camino lleno de giros hasta la aldea de Porciles. A partir de aquí la ruta se vuelve más llana hasta llegar a Bodenaya en donde hay un albergue de peregrinos, y un kilómetro más adelante está La Espina, esta localidad cuenta con todos los servicios.
Nuestro camino continua, entre robles y caminos de tierra, de vez en cuando tenemos algún repecho fuerte que pone a prueba nuestras piernas ya entrenadas en subidas anteriores, hasta bajar de nuevo a la altura de El Pedregal, en donde hay una tienda con bar.
Durante todo el recorrido, hasta Tineo el paisaje es impresionante, la naturaleza se muestra en todo su esplendor. A la entrada se bordea el campo de fútbol y junto a un parque está la capilla de San Roque. Para llegar al albergue no es necesario bajar al centro de la población sino que pasado la capilla de San Roque existe un desvío hasta el albergue.
DISTANCIA: 20,2 Km
- Km 0,00 – Salas
- Km 5,90 – Porciles
- Km 7,80 – Bodenaya
- Km 8,90 – La Espina
- Km 12,9 – El Pedregal
- Km 16,9 – Santa Eulalia
- Km 20,2 – Tineo
CUENTOS Y LEYENDAS DE LA ETAPA
Cuenta esta leyenda… que San Francisco, en su peregrinación a Santiago, fundó el convento de San Francisco. Aunque parece que fue fundada por la Orden del Temple y regida desde el siglo XIII por los franciscanos.
En este monasterio se promovió la cultura con cátedras de latín, filosifía y teología. Ahora en el lugar del monasterio está la Iglesia de San Pedro de Tineo.
